- Reclutadores. Hay muy pocos buenos, que se comunican como seres humanos normales, hacen citas y las cumplen, brindan información y responden preguntas de manera inteligente. El resto no tiene idea, mienten continuamente, hacen promesas que no tienen intención de cumplir, emiten juicios instantáneos que no están calificados para hacer y no brindan comentarios, y mucho menos lo hacen de manera oportuna.
- Sistemas de seguimiento de solicitantes y otros sistemas que intentan aplicar inteligencia artificial al proceso de reclutamiento. El problema es que la inteligencia artificial debe complementarse con inteligencia humana, pero, por desgracia, los reclutadores.
- “Procesos” de reclutamiento donde se da demasiada discreción al reclutador en lugar del gerente de contratación, y donde la retroalimentación y la comunicación con el candidato son una ocurrencia tardía, si no una carga
- (sí, lo sé), bolsas de trabajo que siguen enviando correo no deseado y otros elementos no deseados, vea esto: Presentación de Recursos Humanos a ZipRecruiter – Pregunte a The Headhunter®
En general, creo que el principal problema en el reclutamiento es que no hay responsabilidad. Lo único que importa es llenar los asientos, no identificar y obtener los mejores candidatos para el puesto. Ningún reclutador fue despedido por perder un candidato A.