¿Es mejor negociar el tiempo de vacaciones planificado previamente para un nuevo trabajo durante la entrevista o después de una oferta?

Si. Dos cosas de las que debes evitar hablar durante el proceso de entrevista

  1. Tiempo libre: inmediatamente te hace ver como un vago, alguien que odia trabajar y solo está interesado en las vacaciones. No importa lo importante que sea para usted, debe diferir la conversación. Incluso si traen el tema de los beneficios, puede preguntar sobre cualquier otra cosa, excepto el tiempo libre.
  2. Salario: cuando esto se menciona durante las entrevistas, solo buscan una razón para no contratarte. Por lo tanto, puede decir “Prefiero no hablar de eso ahora, a menos que debamos hacerlo”. Ciertamente, debe evitarse en una primera entrevista. Esto es diferente cuando estás hablando con un reclutador o cazatalentos. Tienen que hablar con un centenar de personas al día, por lo que están ansiosos por asegurarse primero de que esté en el estadio.

En resumen, las dos cosas que más le pueden interesar deben ser eliminadas del centro de atención y diferidas hasta que se le envíe una oferta verbal.

Tuve una situación similar. Esperé hasta que tuve una oferta. Como lo mencionaron otros, recomiendo ofrecer tomarse un tiempo libre sin pago si no tiene las vacaciones acumuladas. La mayoría de los empleadores entenderán que el matrimonio no es, con suerte, un hecho frecuente. Mi situación era una vacación planificada de una semana con boletos no reembolsables que comenzaron en la segunda semana después de que me contrataron. Les di la opción de comenzar y luego tomar las vacaciones, o diferir mi fecha de inicio. Su preferencia era empezar, y hacer un seguimiento de las vacaciones utilizadas y dar cuenta de ello más tarde.

El mejor momento para negociar es después de que se haga la oferta, suponiendo que el tiempo libre esté relativamente cerca (por ejemplo, los próximos cuatro meses). Luego, hágales saber por qué necesita las cuatro semanas. Si es necesario, ofrezca tomarlo sin pagar.

Trabajé con un hombre de la India que necesitaba cuatro semanas libres para su boda. Era un empleado relativamente nuevo (no del todo su situación pero cercano). Cuando acudió a nuestro gerente, le explicó su situación y le ofreció tomar las cuatro semanas sin paga si fuera necesario. Su solicitud fue entendida y concedida.

Si faltan nueve o diez meses para la boda, no lo mencionaría durante el proceso de contratación.